Rafa, el campeón del mundo.

Consagrado en 2011 campeón mundial junto a Nicolás Pretto en Saint Vulbas, Rafael Randazzo vuelve a ser noticia al regresar a Almafuerte de su Bahía natal para este 2019. Compartimos la nota del diario La Nueva.

Rafael Randazzo repite por primera vez.

El puntero de 26 años, que llegó a ser Olimpia de Plata, retornará a Almafuerte, donde en 2010 conquistó el título por Tercetos junto a Juan Pablo Urra y Jesús Arrieta.

«Estoy contento porque vuelvo a un club donde viví una de las mis mayores alegrías como bochófilo. Nunca antes había jugado dos veces en un mismo club».

Rafael Randazzo espera ansioso la resolución de la Asociación Bahiense de Bochas en cuanto a la disputa de los certámenes locales. Pero está feliz con el traspaso a su nuevo club, Almafuerte, al que ya conoce desde 2012, cuando integró el terceto campeón junto a Juan Pablo Urra y Jesús Arrieta.

«Ojalá se juegue primero el de tríos y no el de pareja, como se está hablando. Sería lindo porque tenemos un buen equipo, junto con Pablo Spurio y Jesús Arrieta», dijo «Rafa», quien aseguró su continuidad en el albiverde hasta mediados de año.

«No puedo asegurar que estaré todo el año, porque tengo una propuesta laboral para emigrar a otro país. Eso se resolverá en junio, pero es algo convincente e, incluso, me permitiría jugar allá», agregó Randazzo, quien no ofreció mayores detalles, aunque todo indicaría que se trataría del país de los canguros.

«Rafa» inició su recorrido jugando para La Armonía y luego pasó por Sociedad Italiana de Tornquist, Tiro Federal, Almafuerte (2012, donde conquistó el torneo Clausura y la final por Tercetos), 9 de Julio, Barrio Hospital e Independiente Municipales (2018).

«El año pasado estuve 3 meses en España y luego volví para jugar en Independiente. Ahora estoy entrenando a full para arrancar bien en Almafuerte, donde me voy adaptando al piso de alfombra, que es una superficie nueva para mí», dijo Randazzo, quien fue contratado por el presidente Mario Bertazzo.

«¿Cómo me siento? Pienso que estoy casi en el máximo nivel que puedo llegar a dar. Desde que practiqué mucho el bochazo con Daniel (Vitozzi), en Barrio Hospital, me siento un jugador más completo. Estoy bárbaro en lo físico y en lo deportivo», sintetizó.