Por Juan Carlos Licari.
Desde que tuvo uso de razón fue de San Vicente, vivía a 3 cuadras del Club, donde su padre era el tesorero de la primera sub-comisión de bochas, formada la misma por sus tres tíos, allá por el año 1945.
Sin dudas sus raíces están en este Club, donde creció y lo marcó, como un punto de partida, para desarrollarse y afrontar su mundo cotidiano, de supervivencia, basado en el arduo trabajo diario.
Repasando su ejemplar vida terrenal, comprendidos en los setenta y cuatro años, están almacenados en esa entidad, corazón del barrio del mismo nombre, toda su actividad particular y deportiva.
Era conmovedor y graficaba su don de bien, cuando proclamaba a los cuatro vientos, su agradecimiento permanente, por haber tenido la fortuna de formar parte de grandiosos e inolvidables momentos en la historia bochófila de «Su San Vicente».
Allí en Sargento Cabral y Velez Sarsfield, fue niño, adolescente y adulto, regaba aquellas tres primeras canchas, «pasaba la bolsa sobre las mismas», para obtener la autorización de «arrimar y bochar» hasta que llegaran los mayores».
Fugazmente pasó por otra institución, pero volvió «porque este es mi hogar, un pedazo muy grande de mi existencia y le debo mucho de lo que hoy soy como hombre» declaraciones en un reportaje radial el 20 de abril de 1991, al cumplir el Club sus bodas de oro.
Historiando su trayectoria es una altivez que eriza nuestra piel, los años de actividad están llenos de logros, que no tuvieron límites y son perfectos causantes de asombro, admiración y sin dudas ejemplos de perseverancia, inteligencia y esa vocación de «su alma ganadora», en las buenas y en las malas, en las fáciles y en las dífíciles.
Recordar al Juancito Carrasco, el de San Vicente, el de Bell Ville, el de sus bondades, el del compromiso con las bochas, el del respeto y admiración que inspiraba en todas sus presentaciones, el del amor propio que nunca lo llevó a bajar los brazos, el de la franqueza envuelto en una humildad sin límites.
Nuestra imaginación nos lleva a pensar que en una de las estrellas más brillante, «el Pepe» Ghio, estará convocando «al Gringo» Verra, «al Richard» Quinn, «al Chiche» Mainero, «al Colorado» Prats, «al Negro» Panebianco, y cuántos más, para «jugar»un partido especial.
¡Gracias por todo lo que nos brindaste!
El estadio de su San Vicente.